¿Cuál es la diferencia entre el secado primario y secundario en el secado con bomba de calor?
El secado con bomba de calor con fuente de aire se ha aplicado con éxito en varios campos y las propiedades de los materiales secos también varían ampliamente. Existen diferencias entre el secado primario y secundario en el secado con bomba de calor. Las propiedades del material y los tipos de cliente de secado primario y secundario son diferentes. El proceso de secado también tiene ciertas diferencias. TROCKNNER se ha comprometido con la investigación, el desarrollo, la producción y la promoción de productos de secado con bomba de calor y ha acumulado una gran cantidad de casos de aplicaciones prácticas.
Secado de una sola vez: El objeto son productos frescos, que pueden almacenarse o venderse después de una deshidratación de una sola vez.
El secado en una sola etapa tiene como objetivo la eliminación del agua empleada una única vez para cumplir con los requisitos del producto seco. El propósito principal de secar materiales es quitar la humedad para permitir un almacenamiento prolongado. Los items susceptibles a este proceso incluyen principalmente productos frescos con alta concentración de agua y una rápida tasa de evaporación. Luego de ser secados, alcanzan la humedad adecuada para su almacenamiento o venta directa. Entre los materiales más tratados encontramos frutas, verduras, carnes, aves y productos marinos. La clave es evitar la descomposición que puede presentarse si la humedad no se extrae rápidamente, impidiendo así su conservación a largo plazo. El secado inicial también puede preparar el terreno para un secado secundario, extrayendo parte del agua para extender su durabilidad y simplificar procesos futuros. Por ejemplo, materiales que requieren corte antes de completar su secado necesitan un cierto nivel de humedad para evitar deformaciones o roturas en el proceso.
Tomemos el ejemplo de los higos frescos, con una humedad inicial cercana al 78%. Tras unas 16 horas de secado, esta se reduce al 14%. Al cumplir con los estándares de humedad, los higos están listos para almacenarse en condiciones frescas y secas o para ser empacados y vendidos directamente. Si la humedad residual es superior a la necesaria, se corre el riesgo de deterioro si se conservan durante mucho tiempo, lo que afectaría su lugar en el mercado en términos de calidad y precio.
En conclusión, la meta principal del secado en una única etapa es procesar productos recién cosechados hasta lograr la consistencia deseada sin la necesidad de etapas adicionales de secado o tratamientos posteriores, resultando en un proceso más largo con alto volumen de agua a ser evaporado y un producto final ligeramente menos seco comparado con procedimientos de secados sucesivos.
Secado secundario: el material elimina agua lentamente y el proceso es relativamente más complejo.
El secado secundario implica secar un material por segunda vez, es decir, ya pasó por un proceso de secado previo. Los materiales que se someten a este proceso suelen ser aquellos que liberan agua lentamente y requieren un proceso más cuidado, como las frutas de gran tamaño, la madera, hierbas medicinales y productos industriales. Algunos de estos materiales, luego de un primer secado y un segundo procesamiento, alcanzan el grado de secado necesario para ser considerados productos terminados y se pueden comercializar.
Por ejemplo, consideremos el secado del trigo. Tras madurar, se secaba naturalmente en el campo antes de ser cosechado. El trigo, al ser recolectado, contiene aproximadamente un 30% de humedad. Para poder guardar el grano en un almacén o procesarlo más a fondo, se necesita reducir su contenido de humedad a cerca del 10% mediante dos secados previos. En este procedimiento, la pérdida de humedad no es grande, la temperatura de secado debe ser moderada y el tiempo, relativamente breve. Estos cuidados son imprescindibles para asegurar la calidad del producto final.
Además, debido a sus características, muchos materiales tienen una tasa de evaporación del agua baja y no logran cumplir con los requerimientos de humedad en el secado. Aun alcanzando los requerimientos, la calidad final de los productos puede verse comprometida, presentando problemas como núcleos negros, entre otros. La humedad interna de frutos y tubérculos es difícil de eliminar. Por ende, necesitan someterse a un proceso de secado primario antes de entrar a la secadora para un secado efectivo, lo que constituye un segundo secado. Tanto la madera como los insumos medicinales y los productos industriales poseen altos niveles de humedad que, por lo general, no se alteran en poco tiempo. Por tanto, para reducir el tiempo de secado y abaratar los costes, es viable exponerlos al ambiente natural por un periodo antes del secado en cámara, realizando así un secado secundario. A diferencia del secado inicial, el secado secundario frecuentemente necesita una temperatura más elevada y un menor tiempo.